4 errores que acabarán quemándote en el trabajo

Seguro que has escuchado antes el término “burn out”. El síndrome de burnout es un padecimiento derivado de una situación prolongada de estrés y también es conocido como el síndrome de desgaste profesional. En definitiva, lo que comúnmente conocemos como “estar quemado”. Se trata de una sensación de cansancio emocional, vinculada al ámbito laboral, que conduce a una pérdida de motivación y acaba generando sentimientos de inadecuación y fracaso.

burnout

Si bien el término se acuñó en los años 70, este síndrome es una realidad más que palpable en los entornos laborales actuales. Es una plaga que afecta cada vez a más trabajadores europeos. Según la Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo, el estrés es la causa del 30% de las bajas por enfermedad en Europa.

¿Qué podemos hacer en nuestro entorno laboral para evitar llegar a esta situación de agotamiento físico, mental y emocional? Toma nota de los errores que debes evitar:

Error 1. No saber poner límites. Saber decir que no y no echarse a la espalda todo lo que nos encargan sin poner ningún límite evitará que, a la larga, sintamos agotamiento y frustración.

Error 2. Ser demasiado perfeccionista. Querer hacer todo extremadamente perfecto requiere invertir mucha energía en cada tarea, en cada reunión a organizar, en cada dossier… Energía pero también tiempo que, probablemente, sea interpretado como falta de productividad y eficiencia. Tener la sensación de que el resto del equipo o los superiores no valoran todo el esfuerzo realizado nos conduce a una sensación de desmotivación y frustración.

Error 3. No gestionar bien las emociones negativas. En el entorno laboral, las emociones negativas pueden aparecer por diferentes motivos: presión, mala relación con los compañeros, miedos, situaciones percibidas como injustas, etc. Todas estas situaciones pueden generarnos emociones como la cólera, el resentimiento, la rabia o la frustración, entre otras. Guardárnoslas y no gestionarlas adecuadamente provocarán que nuestro nivel de “burn out” crezca cada vez más. Practicar ejercicios de respiración, mindfulness o acudir a un especialista pueden ser buenas soluciones para aprender a gestionar estas emociones.      

Error 4. Descuidar nuestra alimentación e hidratación. ¿Comes demasiado frecuentemente delante de la pantalla de tu ordenador para acabar un trabajo? Gran error. Sí, es cierto que en ocasiones no queda otra solución, pero esto debería ser excepcional. Es muy necesario tomarse un tiempo para nosotros mismos, respetar la pausa de la comida y cuidar nuestra alimentación e hidratación. Un cerebro mal alimentado e hidratado no tendrá la energía suficiente para realizar sus funciones. Los dolores de cabeza y la falta de memoria y concentración provienen a menudo de una escasa hidratación. Nuestro cerebro se compone de un 95% de agua y nuestro cuerpo de un 74%, parece lógico que necesiten una buena hidratación para funcionar bien, ¿no?