Conseguir una entrevista de trabajo es un gran logro. La búsqueda tiene sus frutos y hay que preparar correctamente este momento. Saber cuáles son las preguntas más típicas y frecuentes que pueden hacer es útil porque en cierta manera da ventaja sobre el resto de candidatos que no las conozcan. Pero no se trata de aprenderse las respuestas de memoria si no tener claro lo que se quiere transmitir para evitar titubeos, respuestas desacertadas y momentos incómodos.
-¿Por qué quieres trabajar con nosotros?
Hay dos puntos clave en la respuesta a esta pregunta. Se debe hablar del entusiasmo e interés por la empresa pero sin olvidar argumentos que indiquen que eres valioso para ella.
-¿Cuáles son tus puntos fuertes y débiles?
Los puntos fuertes que se mencionen deben ser relacionados con el puesto al que optamos y los puntos débiles que no tengan relación directa con él, siempre exponiendo un punto positivo en cada debilidad o alternativas para solucionarlos.
-¿Qué sabes de nuestra empresa?
No será un problema si se ha preparado la entrevista y el momento. Se requiere cierta investigación de la compañía y habrá que hablar de sus ideales y objetivos y relacionarlos con uno mismo.
-¿Dónde te ves en cinco años?
Lo que se busca con esta pregunta es conocer los objetivos del candidato a medio plazo. La mejor forma de responder es con un tono neutro.
–Cuéntame sobre ti.
Es una de las preguntas más comunes en una entrevista de trabajo. Suele servir para comenzar y que el candidato pierda los nervios. Se tiene que hablar de la formación y experiencia así como de cualquier dato que sea interesante y se pueda valorar.
–Por qué deberíamos contratarte a ti y no a otro.
Importante tener muy presente la marca personal. Eso hará que menciones todas las aptitudes, logros y habilidades que te definen. Es saber venderse bien y buscar el elemento diferenciador frente al resto de candidatos.
Fuente: rrhhdigital.com
Foto: puntoinversiones.com
