En los últimos años, hemos presenciado una serie de eventos sin precedentes a nivel mundial que han impactado en múltiples aspectos, entre ellos, las relaciones laborales, que no han sido ajenas a muchos cambios.
La inestabilidad en los mercados y la economía ha puesto en relieve prácticas poco éticas y ha tenido como resultado un aumento significativo de los casos que hoy se conocen como ‘despido silencioso’ o ‘Quiet Firing’. Este fenómeno no se refiere a acciones tomadas por los empleados, como en el ‘Quiet Quitting’, sino más bien a decisiones adoptadas directamente por las empresas
El quiet firing o despido silencioso es una práctica laboral que consiste en la eliminación de un trabajador de la empresa sin que se produzca un despido formal. Se trata de una estrategia que se utiliza para ahorrar costos y trámites asociados a un despido convencional.
¿Se lee mal? ¿Crees que puede ser tu caso? Aquí resolveremos tus dudas
¿Qué es el quiet firing?
Como lo hemos dicho anteriormente, el quiet firing o despido silencioso es una práctica laboral, poco ética, en la que un empleado es progresivamente ignorado hasta el punto en que decide renunciar voluntariamente. A diferencia de un despido convencional, que implica un proceso formal de terminación, el ‘despido silencioso‘ se lleva a cabo de manera sutil y frecuentemente pasa desapercibido
Se puede presentar de diferentes maneras, entre las que se incluyen:
- Reducción de la carga de trabajo: puede verse en la reducción de carga de trabajo de forma significativa, hasta el punto de que ya no tenga nada que hacer el trabajador.
- Aumento excesivo del volumen de trabajo: hay otros casos donde se produce sin ninguna justificación. Suele contribuir al aumento del estrés y malestar del trabajador, así como el crecimiento de errores en el desempeño de las tareas.
- Cambio de puesto o departamento: el trabajador puede ser trasladado a un puesto o departamento menos importante o con menos responsabilidades.
- Asignación de tareas menos importantes: el trabajador puede ser asignado a tareas menos importantes o que no requieren sus habilidades o experiencia.
- Aislamiento del trabajador: puede ser aislado de sus compañeros de trabajo y de la toma de decisiones.
- Negación de oportunidades de desarrollo: puede verse en la negación de accesos a oportunidades de desarrollo profesional, como formación o ascensos.
Tipos de Quiet Firing
Existen dos tipos principales de quiet firing:
- El Quiet Firing directo: se trata del tipo de “despido silencioso” más común. En este caso, el trabajador es claramente consciente de que está siendo despedido, aunque no se le haya comunicado formalmente.
- El Quiet Firing indirecto: En este caso, el trabajador no es consciente de que está siendo despedido. Se produce de forma gradual y sutil, el trabajador puede tardar en darse cuenta de lo que está sucediendo.
Causas del quiet firing
Puede tener diferentes causas, entre las que se incluyen:
- Razón económica: la empresa puede estar atravesando una situación económica difícil y no poder permitirse despedir a los trabajadores de forma formal.
- Razón personal: la empresa puede tener una mala relación con el trabajador y querer prescindir de él.
- Razón organizativa: la empresa puede estar reorganizando su estructura y el trabajador puede no encajar en el nuevo organigrama.
Consecuencias del quiet firing para el empleado
Puede tener consecuencias negativas para el trabajador, entre las que se incluyen:
- Pérdida de empleo
- Dificultades para encontrar un nuevo empleo
- Pérdida de salario
- Pérdida de beneficios sociales
Consecuencias del quiet firing para la empresa
También puede tener consecuencias negativas para la empresa, entre las que se incluyen:
- Pérdida de talento
- Pérdida de productividad
- Daños a la imagen de la empresa
¿Es el Quiet Firing una situación de abuso?
El Quiet Firing puede considerarse una situación de abuso, ya que consiste en la eliminación de un trabajador de la empresa sin que se le dé la oportunidad de defenderse o de encontrar un nuevo empleo.
En España, el Estatuto de los Trabajadores establece que el despido debe ser “motivado”. Esto significa que el despido debe estar justificado por una causa objetiva o por una causa disciplinaria.
El Quiet Firing no cumple con este requisito, ya que no se basa en una causa objetiva o disciplinaria. Por lo tanto, el quiet firing podría considerarse un despido improcedente, lo que permitiría al trabajador reclamar una indemnización a la empresa.
¿Qué se puede hacer ante un Quiet Firing?
Entendemos lo desafiante que puede ser estar pasando por una situación así, por eso te ofrecemos ciertas acciones que podrías tomar en caso de sufrir un Quiet Firing:
- Comunicación: puedes hablar directamente con tus superiores o departamento de recursos humanos y aclarar tus preocupaciones. Expresa tus preocupaciones.
- Documentación: si es posible, guarda un registro detallado de todas tus interacciones laborales, incluyendo correos electrónicos, retroalimentación recibida y cualquier cambio significativo en tu carga de trabajo y responsabilidades.
- Busca apoyo en tus compañeros: si mantienes una relación laboral complicada con tus supervisores, busca apoyo en otros líderes o colegas en quienes confíes dentro de la empresa, para obtener orientación o perspectivas diferentes y adiciones sobre la situación.
- Explora recursos humanos: si aun no logras encontrar una solución interna, considera buscar asesoramiento legal o sindical para comprender cuales son tus derechos laborale y así evaluar tus opciones
- Evaluar otras alternativas: considera la posibilidad de buscar otras oportunidades laborales o prepárate para un posible cambio de ambiente laboral
Recuerda que cada situación es única, por lo que la mejor manera de abordar un despido silencioso puede variar según las circunstancias. Es esencial mantener la calma y actuar con prudencia mientras buscas resolver la situación de la manera más constructiva posible.