¿Soy un buen jefe?

Quizá algunas de las personas que leen este blog tienen un puesto de responsabilidad en su empresa. Si es así, alguna vez ha podido surgir alguna de las preguntas, ¿seré un buen jefe?, ¿estaré a la altura?. Y es que cuando alguien se gana un ascenso, en algunas ocasiones no se está preparado para asumir el cargo. No porque no se tengan conocimientos sobre las tareas que desempeñará, si no porque la transición para ser el superior de los que antes eran compañeros tiene un alto nivel de estrés.

Buceando en la red hemos encontrado algunos de los errores más clásicos que se cometen en estas situaciones. Todos ellos vienen recogidos en el libro de Lindsey Pollak, “Becoming the boss” (Convertirse en jefe).

-Hacer el trabajo de otras personas. Hay que saber delegar y no hacer el trabajo que corresponde a otros ya que las nuevas responsabilidades serán otras y no dejarán tiempo para gestionar asuntos del equipo de trabajo.

-Motivar al equipo. Si se da un ascenso, uno de los motivos principales es porque se es bueno en el trabajo pero no es el único. El jefe debe saber gestionar y organizar las tareas de las demás personas del equipo.

-No salir del despacho. El miedo inicial  a no conocer a nadie hace que el nuevo jefe se esconda y no se relacione. Nos tendremos que mover y hacer relaciones con el equipo, es esencial la manera en la que nos perciben.

-Dejar ver las inseguridades. Los inicios siempre son costosos, así que será mejor no hacerlo más difícil dejando entrever al nuevo equipo cuáles son las inseguridades que tenemos, si se es demasiado joven, si se es mayor, etc. Habrá que presentarse como una persona accesible y que sabe lo que hace.

-No querer tener pronto resultados. Como en todos los comienzos habrá un periodo de adaptación en el que el nuevo jefe deberá motivar a su empleado para que el punto de partida sea positivo y los resultados acaben llegando.

-Mostrarse como alguien más del equipo. El trabajo en equipo debe ser eso, en equipo. Hay que hacer tiempo para el pensamiento estratégico y la concentración.