Trabajar de pie y sentados para mejorar la salud

Pasar horas y horas sentados en nuestro puesto de trabajo es nefasto para la salud. Con el fin de acabar con el sedentarismo y atajar las consecuencias que este acarrea para nuestra salud, existe un nuevo tipo de mesa de oficina que cada vez está más presente en los puestos de trabajo: el escritorio sentado/de pie.

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Obesidad, dolores de espalda o enfermedades cardiovasculares son algunos de los males asociados a un sedentarismo excesivo.  Es recomendable moverse del escritorio cada 2 o 3 horas pero nuestras rutinas diarias frente al ordenador o un exceso de trabajo hacen que nos olvidemos de un gesto tan importante como es levantarse, cambiar de postura y moverse un poco durante la jornada laboral. Poner una alarma en el móvil para recordarnos que es hora de levantarnos puede ser una buena idea. Asimismo, existen brazaletes que detectan largos periodos de inactividad y comienzan a vibrar cuando llega el momento de moverse un poco.

No obstante, para paliar este mal común, existen los escritorios de pie/sentados.  Son mesas motorizadas gracias a las que podemos subir y bajar el escritorio y, así, alternar el trabajo sentados y de pie. Además, permiten adaptar la altura exactamente a la morfología de cada persona.

El cuerpo humano no está hecho para estar sentado sino, más bien de pie, pero de pie y en movimiento por lo que estar toda la jornada de pie tampoco es la solución a los problemas. Por eso, este tipo de escritorios son una muy buena solución para alternar ambas posturas y encontrar el punto intermedio en el que nos encontremos cómodos y nuestra salud no se vea perjudicada. Además, cambiar de posición mejora la concentración, la creatividad y el bienestar en el puesto de trabajo.

Facilitar soluciones ergonómicas de este tipo tiene grandes beneficios para la organización ya que reducen el absentismo (el dolor de espalda es la principal causa de baja), aumenta la motivación y la satisfacción de los trabajadores e incrementa la productividad.